Bodegas en venta en Segovia, la esencia del Duero

La provincia de Segovia es la más pequeña de la autonomía de Castilla y León, con una superficie de 6920 km². Limita con Valladolid y Burgos al norte, Soria y Guadalajara al este, Madrid al sur y Ávila al oeste. Está dividida en cuatro partidos judiciales: Cuéllar, de Santa María la Real de Nieva, Segovia y Sepúlveda.

HISTORIA DEL VINO

Castilla y León es tierra de vinos, y aunque la provincia de Segovia no presume de gran extensión de viñedos, sí que tiene una gran variedad en sus bodegas. En la DO Valtiendas y la DO Ribera del Duero, la viticultura se remonta a los monjes cistercienses de San Bernardo, que llegaron en el siglo XII. Importaron las viñas de Francia y Cataluña, pero supieron adaptarlas a la tierra y darle fama a sus vinos.

Si hablamos de las bodegas del noroeste de Segovia, todavía habría que remontarse más. La elaboración de vinos blancos en la zona de la Campiña Segoviana se remonta a tiempos inmemoriales, y así lo demuestran las bodegas en el subsuelo, sin contar otras más tardías como la del antiguo Monasterio del Parral. En él se fabricaban vinos, tanto para consumo propio como para la venta en la ciudad de Segovia y otras regiones.

VINOS Y BODEGAS

En Segovia se pueden distinguir tres grandes zonas de bodegas: la Denominación de Origen Rueda, situada al noroeste en la Campiña Segoviana, y la de mayor tradición; la Denominación de Origen Valtiendas, que es la más joven; y la Denominación de Origen Ribera de Duero, que roza el extremo norte. Las bodegas segovianas más destacadas son Bodegas Severino Sanz, Bodegas Shaya, Bodegas Ossian, Bodegas Avelino Vegas, Bodegas Navaltallar o Bodegas Zarraguilla.

PUNTOS DE INTERÉS

En la misma ciudad de Segovia, donde hay un destacado casco histórico, se encuentra el famoso acueducto romano, uno de los monumentos más importantes de España. En general, la provincia cuenta con un patrimonio muy atractivo. Es habitual encontrar castillos como el de Cuéllar o Pedraza; y también cabe destacar el Palacio Real de La Granja y el Palacio Real de Riofrío. A nivel gastronómico, tiene fama el cochinillo asado y se los embutidos de muy distintos tipos, que tienden a regarse con buen vino.