Ayudas europeas al sector vitivinícola

Oportunidad para inversores: las ayudas europeas al sector vitivinícola se renuevan

La reformulación de las ayudas europeas concedidas a los viticultores, dentro del Programa de Apoyo para el periodo 2019-2023, favorecen la compra de bodegas por activos

Buenas noticias para los inversores interesados en las bodegas de España. Las ayudas europeas para el sector vitivinícola, y cuyo presupuesto asciende a más de 1.000 millones de euros, sufren una reformulación muy beneficiosa como consecuencia de la aplicación del tercer Programa de Apoyo al Sector Vitivinicola Español para el periodo 2019 a 2023. En concreto, las medidas elegibles para solicitarlas serán promoción de vino en terceros países, reestructuración y reconversión de viñedo, destilación de subproductos e inversiones.

Esto quiere decir que, a la recuperación y transformación del viñedo, se suma ahora la del propio inmueble de la bodega, lo que favorece la compra por activos. En el borrador redactado por los organismos europeos, y aprobado por España mediante un Real Decreto, se establece que se concederá apoyo financiero a las inversiones tangibles o intangibles en instalaciones de transformación e infraestructura vinícola, pero también en estructuras e instrumentos de comercialización, incluso con el fin de mejorar el ahorro de energía y los procesos sostenibles. Corresponde a cada Comunidad Autónoma concretar la aplicación a través de sus boletines oficiales, como ha sucedido en Andalucía, Castilla y León o la Comunidad Valenciana.

La premisa es que las inversiones se referirán a la producción, comercialización o ambas de los productos vitivinícolas. Ya no solo se ayudará en la renovación de los viñedos, sino también de los propios edificios de las bodegas, donde se producen los procesos de elaboración y posterior salida a la venta de los vinos. La subvención afectará a un ciclo mucho más amplio del negocio, y favorecerá su desarrollo, así como la movilidad y la compraventa en las distintas regiones.

Ayudas europeas para vinicultores

La regulación comunitaria establece que los Estados miembros de la UE, entre ellos España, deben presentar un Programa de Apoyo quinquenal que contenga al menos alguna de las medidas admisibles previstas en la misma. Dado que el Programa Nacional de Apoyo para el periodo 2014-2018 finalizaba el 15 de octubre de 2018, España ya lo hizo en 2017, motivo por el que ahora ha podido convocar las ayudas para los próximos cuatro años dotadas con más de 1.000 millones. El plazo de presentación de solicitudes por parte de los interesados finaliza el 31 de enero de cada año,  salvo para la primera convocatoria, que terminó el pasado 16 de abril.

En concreto, el presupuesto anual de 210 millones de euros se distribuirá así: 72,5 millones de euros para reestructuración y reconversión de viñedos; 56 millones de euros para inversiones; 50 millones de euros para promoción en los mercados de países terceros y 31,8 millones para destilación de subproductos. Cabe recordar que España es el país con la mayor superficie de viñedo del mundo, con más de 950.000 hectáreas. Asimismo, medidas como la promoción del vino en terceros países, permitirán incrementar la capacidad comercializadora en un sector que exporta anualmente por valor de 2.700 millones de euros.