La producción en la zona de Requena se orienta cada vez más hacia estos vinos catalanes que, dentro del territorio valenciano, adquieren su propio sabor diferencial.
El vino español protagonista de las grandes celebraciones, desde cenas navideñas a banquetes nupciales, no es dominio exclusivo de unos pocos. Al cava le hemos puesto la etiqueta catalana, pero lo cierto es que en los últimos tiempos su producción se ha diversificado por toda la Península. Tanto es así que la zona de Requena es pionera en deslocalizar la producción de espumosos, con una apuesta que podría cambiar el paisaje.
Las plantaciones de chardonnay en la zona aumentan de forma exponencial. Se trata de una variedad de uva de piel verde, comúnmente usada para hacer vino blanco, con una calidad superior a las demás. Aunque la D.O. Valencia también produce espumosos, la práctica totalidad se corresponde con el territorio de Requena por el marco normativo y la inversión que conlleva. Es en esta zona donde aumenta la compraventa de viñedo y bodegas.
La Asociación de Elaboradores de Cava de Requena, que está conformada por hasta ocho bodegas (Coviñas, Chozas Carrascal, Dominio de la Vega, Hispano+Suizas, Pago de Tharsys, Torre Oria, Unión Vinícola del Este y Vegalfaro), acaba de cumplir su primer lustro. El pasado mes de junio organizó un evento bajo el nombre de ‘Requena es cava’, con el objetivo de dar a conocer las firmas que en la actualidad elaboran en sus instalaciones este tipo de vino. Sin embargo, su actividad va mucho más allá y pasa por consolidar la idea de cava valenciano.
El resultado son unos productos especiales, de sabor diferencial, de los que además se comercializan ediciones especiales con nuevos diseños de etiquetas y botellas. Son muchos los premios que han obtenido en diferentes certámenes de todo el planeta, destacando en este aspecto las bodegas Dominio de la Vega, Pago de Tarsys, Torre Oria y Castell del Sorells, que se han alzado numerosas veces con el galardón de mejor cava de España.
La tradición vitícola de esta zona valenciana es indiscutible, como demuestran los yacimientos de las Pilillas con objetos de los siglos V y IV a. C. Su siglo de oro fue sin duda a finales del s. XIX y a principios del XX cuando acaudaladas familias construían sus palacios y bodegas con un nivel de lujo como pocas familias pueden. Con el tiempo el negocio de la venta de los volúmenes de vino disminuyó y las bodegas invirtieron en la creación de sus propias marcas para exportar, siendo la región conocida por sus buenos vinos a buen precio.
Región del Cava
Los valencianos no son los únicos que se atreven a desafiar a los catalanes en esto de hacer cava. Tanto es así que existe una D.O. española de vinos espumosos elaborados por el método tradicional, denominada Región del Cava. Incluye hasta 159 municipios de Barcelona, Tarragona, La Rioja, Lérida, Gerona, Álava, Zaragoza, Navarra, Badajoz y València.
El cava es el vino espumoso más exportado, según datos del Consejo Regulador, desbancando con sus 131 millones de botellas al mismísimo champán.