Viñedos de variedades únicas de uva

5 variedades de uva que solo se pueden encontrar en zonas remotas de España

La vid se ha convertido en uno de los cultivos más variados y prolíficos a nivel mundial y, en España, existen variedades diferentes de uva en casi cada región. En este texto queremos ilustrar algunos ejemplos de variedades de vid excepcionales o poco conocidas que no son tan fáciles de encontrar.

Si está interesado en invertir en una bodega, la variedad de uva es un factor determinante cuando se trata del color, aroma y sabor del producto final; así que, cuanto más conocimiento podamos ofrecerle, mejor podrá decidir. España tiene una rica historia vinícola; la mayor parte es una historia de tradición y éxito, pero, en el siglo XIX, toda Europa se vio afectada por una tragedia que extinguió algunas variedades y retrasó el proceso de varios viñedos durante décadas. Continúe leyendo para descubrir cinco variedades de uva únicas que están ganando popularidad entre los bodegueros.

1. Uva alcañón

Las remotas laderas de los Pirineos pueden no ser el lugar más acogedor para el cultivo de la uva blanca, sin embargo, en la Denominación de Origen Somontano están recuperando una variedad de uva autóctona: la alcañón.

La región de Somontano se encuentra en Huesca, en el norte de Aragón. Por tanto, su cercanía a las montañas se traduce en un clima cálido y seco en verano y frío, nublado y lluvioso durante el invierno. Estas condiciones han permitido a las bodegas locales recuperar las cepas autóctonas de alcañón que, en el pasado, fueron abandonadas a favor de otras variedades más internacionales y populares.

Esta variedad de uva blanca tiene un color verde amarillento, sabor fuerte y aroma agradable. Los vinos elaborados con esta variedad son de baja graduación alcohólica, frescos y cítricos, con notas afrutadas y, en general equilibrados, matizados y perfumados.

2. Uva brancellao

Durante la década de 1870, los viñedos de toda Europa sufrieron la plaga de un insecto americano conocido como filoxera. Este insecto se alimenta de las raíces de las cepas y, en consecuencia, los viñedos europeos sufrieron daños graves y, en muchos casos, no sobrevivieron. Una de las variedades de uva que sufrió los efectos de este insecto fue la brancellao, también conocida como albarello.

Casi no existen vinos producidos exclusivamente con esta variedad de uva tinta, pero los que hay pertenecen a la Ribeira Sacra, situada en la región noroeste de Galicia. Además, denominaciones de origen como Rías Baixas y Ribeiro autorizaron el uso de la uva brancellao.

El vino tinto elaborado con estas uvas tiene una alta graduación alcohólica, mantiene un cierto nivel de acidez y tienen un aroma distinto y agradable. Sin embargo, la falta de profundidad en su color limita el uso de esta variedad tinta en vinos monovarietales.

3. Uva bruñal

La región de Arribes del Duero, al oeste de Castilla y León, también estuvo afectada por la filoxera en el siglo XIX. Sus viñedos fueron devastados; no obstante, los enólogos locales empezaron a cultivar uva bruñal a principios del siglo XX. El origen de esta resistente cepa aún no está claro, aunque las plantas que se encuentran actualmente en zonas aisladas de difícil acceso pueden tener información genética importante al respecto.

El vino que resulta de esta variedad tinta tiene un alto grado alcohólico, buen cuerpo y acidez equilibrada. A pesar de su alta calidad y debido a su escasez, la uva bruñal se utiliza principalmente para producir vinos concentrados.

4. Uva godello

Se cree que la uva godello podría tener sus orígenes en el siglo XII en las regiones del noroeste de España, especialmente en las inclinadas y escarpadas orillas del río Sil. A pesar de la popularidad de la uva albariño en esta región, las antiguas variedades autóctonas olvidadas como la godello, están siendo redescubiertas y ganando relevancia. Las denominaciones de origen como Valdeorras y Bierzo la utilizan como cultivo principal para la producción de vino blanco.

La mayor ventaja del vino blanco elaborado con esta variedad de uva es que envejece bien en barricas de madera. El resultado de este proceso de maduración es un vino complejo y elegante con un grado alcohólico medio y un aroma fresco y afrutado.

5. Uva forastera

Los cultivos de uva forastera, o lo que sería el antepasado de la uva actual, fueron introducidos en La Gomera por los conquistadores españoles allá por la década de 1450. Esta variedad tuvo la suerte de escaparse de la plaga filoxera que asoló Europa a finales del siglo XIX; el insecto americano no alcanzó el aislamiento de La Gomera, una de las islas más pequeñas de las Islas Canarias. Por tanto, las cepas de forastera son hoy en día la variedad más antigua de Europa.

La planta en sí se adaptó perfectamente a las condiciones meteorológicas de la isla a sus paisajes escarpados e, incluso, desarrolló su propio carácter prosperando en grandes altitudes. El vino resultante tiene matices florales, minerales y afrutadas, un grado alcohólico elevado y un color amarillento con tonos dorados característicos.

Si está considerando invertir en una bodega, Rimontgó dispone de bodegas en denominaciones de origen por todo el territorio español. Tanto si está interesado en una de grandes dimensiones y equipada o si le interesa algo más peculiar, no dude en contactar con nosotros para más información. Estaremos encantados de ayudarle a encontrar lo que está buscando.