Canarias Wine Challenge (Primera Parte)

1ª Edición Canarias Wine Challenge (Parte 1)

El domingo 23 de octubre de 2022, con motivo del segundo Salón de Vinos de Canarias, tuvo lugar la primera edición del concurso de cata a ciegas «CANARIAS WINE CHALLENGE«, organizado por la distribuidora de vinos LA CAVA DE PIÑERO, en el Teatro Auditorio de Agüimes, Gran Canaria. El premio, dotado con 5.000 € para la pareja ganadora; con 1.500 € para la segunda; y con 500 € para la tercera, congregó a veintidós parejas dispuestas a disfrutar y, por supuesto, a competir. Como no podía ser de otra forma, Terror a Ciegas tenía que estar presente en el evento, así que Felipe Pardo y este escribiente cogieron un avión y pusieron rumbo a la aventura.

El viernes 21, alrededor de las nueve de la mañana, llegamos a Gran Canaria, donde lucía un tiempo veraniego que afianzaba el buen fin de semana que teníamos por delante. Dejamos la mochila en La Casona Canaria, en Agüimes -hotel rural altamente recomendable- y nos acercamos a la tienda de La Cava de Piñero para comprar unas botellas con el fin de trabajar aquellos vinos que consideramos que más necesitamos practicar. El resto del día hicimos turismo y, a media tarde, empezamos con el entrenamiento. Luego cena en La Casona Canaria -cocinan de maravilla- y a dormir pronto. El sábado más turismo y luego mismo proceder. Profesionalidad, ante todo.

El domingo se despertó nítido y soleado, perfecto para afrontar el ansiado momento. El Teatro Auditorio de Agüimes es un lugar espectacular para acoger un evento de tal magnitud. La organización, encabezada por Raquel y Raúl Piñero, era impecable. La puesta en escena impresionaba y el ambiente transmitía felicidad.

Comienza el espectáculo.

Llega el primer vino. Una inicial duda con la verdejo que despejamos rápidamente. Sauvignon blanc, estamos convencidos, tanto que conforme el vino se calienta podemos afirmar que es de Nueva Zelanda, Hawke’s Bay, bodega Te Mata Estate, añada 2020.

El segundo vino se muestra poco expresivo. Necesita tiempo para coger temperatura, que se abra, y poder estrujarlo. Volvemos a dudar, pero poco a poco empezamos a ver, con mayor nitidez, la variedad de la godello. La técnica de la copa vacía de nuestro amigo Josep, lo ratifica. Apuntamos hacia Galicia, concretamente, Valdeorras, Louro 2020, de Rafael Palacios.

Tercer vino. Una fina barrica borgoñona nos impide ver, de forma clara, su paisaje. Pinta gran vino. Pensamos en Canarias, barajando la listán blanco de Vidonia PV, de Suertes del Marques, que, además, la habíamos probado recientemente gracias a nuestro amigo David, pero la falta de acidez y mineralidad nos lleva a apostar por una palomino fino -misma variedad de uva, pero con distinto nombre por la zona-, de Cota 45, exactamente el UBE 2018.

Cuarto vino y primer tinto. Pálido, brillante, con ribete anaranjado y destellos verdosos. Más dudas… Catar a ciegas es una incertidumbre constante que obliga, en muchas ocasiones, a sacar “el pico y la pala”. Valoramos distintas posibilidades y, aunque le faltan matices, nos decantamos por una sangiovese de Toscana.

El quinto vino es un golpe de chocolate en nariz. Algo exagerado. La fruta roja, se mezcla con el cacao, el humo y las especias. Coincidimos en que tiene trazas de una pinot noir de Nuevo Mundo, extraña, eso sí. Nos decidimos por Oregón, Estados Unidos.

Finalmente, llega el sexto y último vino de la primera fase. Tempranillo, no hay dudas. Otro tema es ubicarlo en su zona. Nos decantamos por Rioja, apostando por La Nieta 2018, un vinazo de la familia Eguren. Valorando los distintos vinos, pensamos que nos encontramos ante el mejor vino de la fase.

Tras esta primera ronda, salimos del auditorio. Toca que el jurado corrija los formularios. A pesar de desconocer los vinos enmascarados, estamos prudentemente satisfechos. En el hall, hablamos con unos y con otros, comparando y comentando las respuestas. Una hora después, volvemos a entrar en la sala para conocer los vinos y finalistas. La organización, de forma solemne, procede a desvelar los vinos en cuestión:

VINO 1: SAUVIGNON BLANC: NUEVA ZELANDA. HAWKE’S BAY. TE MATA ESTATE. SAUVIGNON BLANC 2021.

 

            VINO 2: GODELLO: ESPAÑA. VALDEORRAS. RAFAEL PALACIOS. LOURO 2021.

 

            VINO 3: LISTÁN BLANCO: ESPAÑA. LA OROTAVA. SUERTES DEL MARQUÉS. VIDONIA PV 2021.

 

            VINO 4: TEMPRANILLO: ESPAÑA. RIOJA. EL COTO. CRIANZA 2018.

 

            VINO 5: PINOTAGE: SUDÁFRICA. PAARL. BOLAND CELLER. CAPPUCCINO. PINOTAGE 2020.

 

            VINO 6: TEMPRANILLO: ESPAÑA. TORO. BODEGA TESO LA MONJA. ALABASTER 2017.

Los dos primeros vinos nos dan un subidón. Los hemos clavado, solo hemos fallado la añada por un año. Muchos puntos. El resto de vinos, es otra historia, pero también han sumado. Hemos rozado el Vidonia PV, pues la variedad de uva es la misma, y con el vino sexto también tenemos continente, país y variedad. Estamos contentos. Falta saber lo qué han hecho el resto de concursantes. Los organizadores cogen nuevamente el micrófono y proceden a nombrar a las parejas finalistas. Las mariposas, inquietas, revolotean por nuestros estómagos. El nerviosismo se convierte en alegría cuando la primera pareja nombrada es la once, la nuestra.

¡Bien, estamos en la final!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *