Bodegas en venta en Canarias

Los vinos volcánicos de Canarias

En Canarias hay numerosas bodegas por descubrir y hasta una decena de Denominaciones de Origen. Los vinos de Canarias se benefician de suelos volcánicos y uvas únicas en el mundo

La viticultura en las Islas Canarias es una actividad cada vez más reconocida. Hablamos de una zona donde los suelos tienen unas características volcánicas muy particulares y los viñedos proporcionan uvas autóctonas que no pueden encontrarse en ninguna otra parte del mundo (Gual, Marmajuelo, Vijariego, Tintilla o Baboso). Las bodegas se organizan en torno a una decena de Denominaciones de Origen, cinco de ellas situadas en Tenerife, y el resto repartidas por las islas. El resultado son unos vinos de Canarias únicos y artesanales, de gran calidad, que los productores locales se están encargando de impulsar y poner en valor en el mercado.

Vinos de Canarias

Es el caso de Bodegas Viñátigo, que posee ocho parcelas de vid en diferentes lugares de la isla de Tenerife, y trabajaba en colaboración con pequeños agricultores. Estos últimos siguen los planes de cultivo sugeridos y, año tras año, entregan su cosecha al grupo bodeguero. Ahora además buscan un pequeño socio apasionado por el vino canario. La compañía apuesta por el amplio patrimonio varietal que existe en las Islas Canarias y, al mismo tiempo, se muestra respetuosa con la agricultura de proximidad. Como la orografía de la isla dificulta la mecanización, el proceso es totalmente artesanal y tiene un gran valor añadido.

Los procesos de Viñátigo también son respetuosos con el medio ambiente y aplican técnicas de cultivo sostenibles. Así lo demuestra el propio edificio donde está asentada la bodega desde 1997, en la Guancha, que se ha construido utilizando materiales del lugar, como la piedra volcánica, la teja envejecida, el hormigón visto y el acero inoxidable. Está distribuido en tres niveles, dos de los cuales están enterrados, permitiendo trabajar por gravedad y reducir el consumo energético. La zona de degustación y venta se encuentra en la primera planta y también reivindica el carácter canario, ambientada con unas coladas volcánicas naturales.

Nos encontramos en una autonomía con unos viñedos que se asientan sobre suelos muy particulares. Como no se vieron afectados por la plaga de la filoxera, proporcionan uvas únicas en el mundo y con gran capacidad de adaptación a los microclimas. A todo ello se suman unos procesos de trabajo especialmente artesanales y cuidadosos, que dan como resultado vinos de gran calidad y cada vez mejor aceptación en el mercado. El patrimonio canario es muy rico y en la medida que los productores aúnen esfuerzos, tiene un gran futuro.